martes, 30 de junio de 2020

Se ha puesto a llover


Se ha puesto a llover (Revisado)

Caminaba bajo la lluvia, ocultando la cabeza en la capucha de su chándal negro, a sus oídos llegaba la música como única guía.

Rehuía de las gentes que entusiasmada aplaudían a los ciclistas que circulaban por el inmensa alameda, y al final en la meta agasajaban a los ganadores, el bullicio era ensordecedor.

No quería encontrarse con caras conocidas, ahora que el carnaval había pasado y aunque algunos se resistían a dejar atrás las máscaras, él se quitó la capucha.

Transitaba por un camino salpicado de plataneros de sombras, solo el rumor de las hojas empujadas por el viento interrumpía su silencio.

Necesitaba escuchar su corazón para curar el dolor de los ecos de nostalgia.

Sostenido por la ilusión de ese verano mágico donde la felicidad lo llevó hacer locuras...

Había regresado a él, un halo de esperanza que le animaba a seguir,  tenía que borrar de su alma la tristeza y el desconsuelo, un solo gesto de ella le bastaría  para cambiar de opinión.

Sus vibraciones iban creciendo a medida que los recuerdos cobraban vida, las mariposas comenzaron a recorrer su estómago, -volverla a ver a pesar del desengaño amoroso-, (cuando salió volando como una paloma fugitiva).

Por fin llegó a lugar de la cita, sumergido en un torbellino de emociones y sentimientos, nervioso e inseguro rompió su silencio, -demasiado tarde para rendirme-, de nuevo cubrió su cabeza con la capucha y sus emociones se tendieron al sol,  una canción le susurra al oído, “se ha puesto a llover”

Copyright © RTPI 16/2019/1187

 

 


1 comentario:

  1. Todo el mundo sabe que tu precioso relato es un excelente trabajo.
    Felicidades y un abrazo

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