lunes, 14 de septiembre de 2020

Ella era única

Ella era única.

En lo más alto del cielo,

allí estaba ella, resplandeciente,

bañada de gloría, 

asombraba su apoteósica figura,

de incomparable belleza,

sus líneas inmortales, irradiaban

vida eterna… eternamente joven.

 

Desde su púlpito azul,

sonreía como los ángeles,

glorificada como símbolo de vida…

mi alma rebosaba de alegría.

 

Como ella no existía mujer alguna,

en otros tiempos la tuve entre mis brazos,

me llenaba de gozo y felicidad,

su dulce juventud me clavaba sus esencias,

y mi cuerpo vibraba sobre su virgen blancura.

 

Me despertaba en su paraíso cada mañana,

sin proponérselo me había robado el corazón,

soñaba que aún vivía y tan hermoso sueño,

me llegó a inquietar.

 

Un grito rompió el silencio,

la muerte blandió su espada,

blanca sombra, angelical, misteriosa,

tan luminosa y tan rara…

la muerte me está diciendo,

lo que la vida se calla.

Copyright © RTPI 16/2020/1580

 




 

2 comentarios:

  1. Un amor tan intenso deja huella y revivirlo con unos versos tan hermosos es como estar en la gloria.
    Felicidades y un fuerte abrazo

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