Para recordarte

Para recordarte

Para recordarte solo tengo soñarte,

pongo mi rumbo hacia ti,

y aunque es lejana tu ausencia,

tú eres la luz que hay en mí.

 

Por el hilo del ensueño,

a la fuente de la vida,

veo congelada mi infancia

en el mar de tus pupilas,

 

Recuerdo cuando éramos niños,

jugando en tu paraíso,

tu belleza asomaba,

como en la flor del narciso.

 

Mujer de encendidos labios,

de latente tentación,

entre nubes de embeleso,

invadió mi corazón.

 

Yo la amaba y ella me amaba,

y el gozo resucitaba,

al ritmo de tambores de pasión,

ella fue la viva llama,

que abrasó mi corazón.

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