jueves, 9 de marzo de 2017

La gravedad de la tierra

Se desangra el volcán,
por el envés de su manto
hormiguero atronador,
bajo la luz del espanto.

El bosque se desespera,
el silencio se reaviva,
como ascuas de una hoguera,
yacen en el agua viva.     

Se escapa la tarde,
a la sombra de un cielo
de tenebroso velo,
y en la lontananza arde.

Tierra de las inquietudes,
espejo de la nostalgia,
tesoro de juventudes,
inocencia e ilusión o solo magia.

La gravedad se incrementa,
mientras la tierra moría
los duelos y las afrentas,
caverna de hipocresía.
Copyright © 16/2016/1450

14 comentarios:

  1. Julio de las Heras9 de marzo de 2017, 20:07

    Para desafiar las leyes de la gravedad hay que amar a nuestra querida Tierra y acariciar su cuerpo celeste y sembrar en ella lo mejor de nosotros mismo para hacerla más fértil y el día de mañana se sentirán orgullosos de nosotros y ella te lo agradecerá.
    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  2. Una poesía para reflexionar por su contenido, estamos agotando los recursos naturales, agua dulce, minerales esenciales, prendemos fuego a las selvas, el calentamiento global nos amenaza y que hacemos nada. Así nos va…
    Un placer leerte

    ResponderEliminar
  3. Si el poema llega a las personas que lo lean ya has conseguido algo importante que tomemos conciencia de la gravedad de la tierra y trasmitamos ese deseo a los demás.
    Felicidades y un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  4. Espléndida manifestación, la tuya poeta, sobre los fenómenos naturales y de gravedad en la tierra.Todo ello, también llevado, en dicotomía, a las explosivas manifestaciones, de la savia,de los sentimientos, o del ardoroso amor;poéticamente hablando.¡Gran ingenio!

    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  5. Tu poema deja huella, no tomamos conciencia del daño que infligimos a nuestra querida tierra, a este ritmo nos vamos a quedar en la más oscura soledad.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  6. La gravedad de la tierra es la gravedad del ser humano una amenaza que nos hacemos nosotros mismos, yo me pregunto ¿somos seres racionales? “O...,”
    Saludos y felicidades

    ResponderEliminar
  7. Por sus ejes transita la vida, sería grave de verdad que la atracción hacia ella sea solo para aprovecharse de su inmensa riqueza y agotar el planeta.
    Una desgracia monumental y un descuido irreparable.
    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  8. Cuidar el planeta es cuidar de la vida de nuestros hijos y de nuestros nietos
    Hay que luchar por ello con todas nuestras fuerzas.
    Besos

    ResponderEliminar
  9. Una interesante realidad artífice de tus versos donde se conjugan empobrecimiento y destrucción.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  10. Hermosos versos que sirven como epitafio del poema
    Se escapa la tarde,
    a la sombra de un cielo
    de tenebroso velo,
    y en la lontananza arde.
    MI FELICITACIÓN

    ResponderEliminar
  11. Somos los guardianes de un tesoro de lo más preciado, nuestra propia vida y que hacemos dispararnos a la cabeza.
    Excelente poema

    ResponderEliminar
  12. Quiero decirte que me encantan tus trabajos poéticos, gozo con su lectura porque están llenos de exquisita sensibilidad y son de rabiosa actualidad.
    Un abrazo fuerte

    ResponderEliminar
  13. Bonitos y profundos versos componen tu interesante poema. Hondas heridas le estamos infligiendo constantemente a nuestra querida tierra desafiando las leyes de la gravedad y algún día el enfermo morirá.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  14. En el hombre se da la paradoja que destruye a quien le dio la vida.
    Inconcebible pero cierto

    ResponderEliminar