martes, 28 de mayo de 2024
sábado, 25 de mayo de 2024
Que secretos guardas tú
lunes, 20 de mayo de 2024
Mentes lejanas
Mentes lejanas Las voces metálicas de las campanas, anuncian
¡fuego! ¡fuego!... Somos el blanco de la codicia humana, que con su propio viento, y sus candentes flechas, en vuelo muy elevado, atraviesan las conciencias, y nos extraen nuestros proyectos cargados de sangre.
Estas mentes lejanas, son como ciclones endiosados, fuera de la horma, que anestesian nuestras cabezas, desde lo más alto, sus ojos de águila, guían nuestros pasos ya cansados, incapaz de volver en su defensa, para hacer frente, al miedo que agita el sistema.
La vida se ha quedado huérfana de palabras, sin voz, sin canto, sin la dulzura de un beso, un ahogado sofoco, fruto del terror que martillea una y otra vez nuestros sentidos.
El mercurio subido de tono, abanica nuestra piel, no diluvia desde hace más de cien años, las sombras caminan lenta, tras la luz de la ironía, el pánico en voz baja, se agiganta y crece, suplicando al cielo, poner una sonrisa en el corazón del mundo, para secar el llanto de los que sufren.
No hay mar donde ahogarse, los pulmones perdieron la humedad, y su consistencia vaporosa es un manantial de luz, ignoro hasta lo que veo, la cabeza se llena de
tinieblas, y el pensamiento en ausente nos anuncia el caos.
Los culpables del abuso, rastrean como serpientes, las lindes del futuro, para atrapar a débiles
colibríes, huidos de la colmena y dejar que trine el bosque. |
viernes, 17 de mayo de 2024
La noche crece
La noche crece, mientras el día con susurro agonizante en su crepúsculo muere.
Las sombras caminan, como estelas borrosas, apagando las voces del silencio, con singular sonrisa.
La
noche crece, mientras
la luna, hace
su ronda, por
la esfera de la tierra.
Abajo
donde el silencio reina, los
amantes sueñan, con
estrellas de alas calientes, y
lenguas ancladas en latente tentación.
La
noche cree, preñada
de dobleces, entre
sábanas de pasión, era
su cuerpo de dicha. la
plenitud del amor.
Ahora
presiento que mi alma suspira
con palpitante anhelo, gimiendo
hasta quedar sin aliento, en
los márgenes del cielo.
La
noche crece y
el mundo sueña y no tiene alma, el
corazón late sin tener sangre, y
los ojos lloran y no tienen lágrimas. Copyright © RTPI – 16/2023/1053 |
martes, 14 de mayo de 2024
La neurona de guardia
La neurona de guardia Hoy no
sabía que escribir, así que intenté abrir un archivo de mi memoria y la neurona
de guardia me respondió que si tenía autorización para abrirlo. ¿Y tú
quién eres para impedirlo?, yo soy la enchufada del cerebro, si quieres extraer
algún archivo de la sesera, tienes que prometerme que me cuidarás como a una
reina. ¡Prometido!,
tú prometes muy rápido, vamos paso a paso, para poder satisfacer mis deseos, lo
primero que tienes que hacer es ingeniártelas para tenerlos. Te voy
a dar una nueva oportunidad, si alguien te pregunta, ¿con que sueñas, tú que responderías?,
sueño con un mundo mejor, ¿está seguro?, sí porque he llegado a tomar conciencia de lo frágil que somos y
que necesitamos cariño para poder subsistir. Pues a
ese punto es donde yo quería llegar, lo que importa es tener el deseo de que
eso suceda, la vida te dirá hasta donde puedes avanzar. Fracasar,
es no intentarlo y seguir confiando que entre todos lo podemos lograr. ¡Abrázame!, ¿por que quieres que te abrace?, porque necesito sentir esa conexión que me une a
ti, que lo dos somos uno. Hoy he
comprobado que la neurona de guardia me produce un pequeño fuego que da calidez
a mi corazón, o tal vez haya sido al revés. La
verdad es que un simple pensamiento, me ha dado la proyección para expresar lo
que siento. Copyright © RTPI – 16/2023/1053 |
sábado, 11 de mayo de 2024
El amor esa bendita ilusión
El amor esa bendita ilusión El
amor esa bendita locura, que
no se puede ocultar, enajena
el corazón, para
poderte soñar.
No
hay fuerza que se resista, somos
un débil cristal con
un deseo infartado, de
vehemente intensidad.
El
amor esa bendita ilusión, que
a la mente enajena, y
te abre el paraíso, y
todo vacío se llena.
Comprendo
a ese corazón, cuando
el alma no espera, con
las hojas caídas del otoño, el
tiempo enciende la hoguera.
El
amor es un sentimiento, es
el cómplice del beso, que
me retorna tu esencia, y
une nuestros afectos. Copyright © Expte-09-RTPI – 01065.5/2024 |
miércoles, 8 de mayo de 2024
Llueve, diluvia, llueve
Llueve, diluvia, llueve Llueve, diluvia, llueve, la tierra se humedece, la esperanza crece, las nubes se levantan, el gallo ya no canta, el sol ha quemado su garganta.
Lluvia, diluvia, llueve, descarga la tormenta, en la mitad del planeta, y en la otra mitad, las llamas devoran el bosque.
Ahora, el hombre llora, va a gata como un recién nacido, lamentando su desgracia, tantas palabras giran, por el trágico poniente,
que restallan en el aire, huyendo del pensamiento, ardiendo el alma está, al separarse de cuerpo.
De pronto, la raza humana, gente suburbana, que vive en las entrañas, de la ciudad oscura, nos miran con lágrimas en las pupilas. Copyright © RTPI – 16/2022/1053 |
sábado, 4 de mayo de 2024
Antes del amanecer de cada día
Antes del amanecer de cada día Si
yo tuviera poder, a
la luna le diría, ¿Por
qué no me dices nada, si
eres tú el alma mía?
Cuantas
veces su imagen, ha
revolucionado mi universo, entre
nubes de embeleso, y
un rojo clamor a besos, que
da sentido al amor.
Pregona
en la noche, esa
eternidad sola, esperando
a un soñador, con
dulce acento, para que ronde,
por su paraíso excelso.
Abrí
mi oscura conciencia, a
su suspirante boca y
en la bóveda del cielo, las
estrellas eran rosas.
Todas
abrían su cáliz, con
clara insinuación, y
mi espíritu encendido, consumaba
el amor.
Cierro
mis ojos para embriagarme, de
su sensual fragancia, la
miro y en la hierba reposa, mi
diosa celeste, tan llena de dicha,
Que
su luz es mi luz, y unidos los dos en el azul, me
estreché a su cintura, y
mi sueño se fue, con aquella mujer a
la que amé antes del amanecer de
cada día. Copyright © RTPI – 16/2023/1053 |
miércoles, 1 de mayo de 2024
Sentí su fuego en mí alma
Sentí su fuego en mí alma Gritaba
a pleno pulmón, que
el alma se desangraba de
tanto pedirle a Dios, que
no estaba preparado, para
emprender ese vuelo, donde
las dudas me asaltan.
Vete,
no quiero verte en mi casa, un
estallido de luz, al
pensamiento desarma, el
cuerpo, no resiste la estocada.
Aquel
huésped me sorprende, cuando
aflora la mañana, esa
luz recién nacida, tiene
aroma de infancia…
Y
de pronto vi su rostro, aunque
nunca he podido recordarla, un
espectro de hermosura, de
un amor que se desgrana.
Anoche
soñé con ella, sentí
su fuego en mí alma, y
en el lecho del delirio, alegre
batir de alas. Copyright © RTPI – 16/2022/3061
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