Cuando éramos niños Recuerdo
cuando éramos niños, y
jugábamos a ser inmortales, hasta
que la muerte nos separe, tú
me mirabas y yo me perdía,
En
el paraíso de tu boca, adoraba
verte sonreír, aquel
momento de gloria, bramaba
dentro de mí.
Todas
las noches soñaba, con
acariciar tu cuerpo, y
la luna se encendía, colgada
del grandioso universo.
Aquella
estrella nocturna, destellaba
besos, de
sus febriles labios, sobre
mi ardiente pecho,
Me
miraste y me perdí, y
al tocarte, mi
sangre se aceleraba, para
en tus venas vivir.
El
tiempo vuela, colgado
de un sueño, de
mi castillo a la escuela, en
un ocaso de ensueño. Copyright © RTPI – 16/2023/1053
|
%20(1).jpe)
Bellísima poesía, es tan tierna, tan delicada, tan maravillosa, que vivo tus fantasías y las disfruto.
ResponderEliminarCuanto te admiro.
Un beso
Malú