Aún
recuerdo la primera vez,
que
te tuve frente a mí,
pensé
en besarte, apagar mi sed,
y
después… ¡huir!
Me
latía el corazón,
a
las caricias del viento,
te
miraba y te miraba,
y
abrazaba tu silencio.
Noche
sin astros en el universo,
una
luna soñadora,
atraída
por mis versos,
bailaba
en la cristalinas olas.
Cada
ola barría
la
playa desnuda.
y
la noche se cernía,
en
sombras de dudas.
Te
miré y me miraste y a ciegas avanzamos,
por
las calles del placer,
que
nos llevó de la mano,
buscando
el amanecer.
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16/2018/1470
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Como olvidar esas miradas que se cruzan y se encuentran y a voz en grito pienso que la felicidad existe.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte
Me gusta tu poesía porque genera sentimientos y emociones, yo recuerdo cuando le conocí, sus palabras me cautivaron, lo miré fijamente y mi alma se puso a temblar, la ingenuidad de tener un corazón que en verdad ama a quien lo contagia de pureza y sensibilidad.
ResponderEliminarTe felicito