Da pavor envejecer Cuanto más hondo es el tiempo, da pavor a envejecer, cada otoño el mismo viento, que arrastra las horas muerta, hasta el abismo de ayer.
Mi cuerpo queda desnudo, desnuda queda mi alma, por donde pasea mi sombra, su presencia es sagrada.
Majestuoso silencio, alumbra el desamparo, de aquella lozana vida, que se sintió envejecer, con el tiempo entre sus brazos.
Corre el tren por la vía muerta, cielo arriba, cielo abajo, no debía tener cuerpo, ni tampoco equipaje, y de pronto las arrugas, invadieron el paisaje. Copyright © RTPI –M –
006470/2021 |
Hola Nico, preciosa ese vejez que el tiempo nos lleva, preludio del desamparo del cuerpo y la elevación del alma.
ResponderEliminarFelicidades y un abrazo grande
Bellísimo poema y en particular esos versos:
ResponderEliminarCuanto más hondo es el tiempo,
da pavor a envejecer,
cada otoño el mismo viento,
que arrastra las horas muerta,
hasta el abismo de ayer.
Un placer leerte amigo