¿Tormentas?,
¡las de Burguillos!,
Bramaban
todas las sierras,
Los
rayos despavoridos,
Caen
de la nube a la tierra,
Con
un tremendo chasquido,
Como
raíces de un árbol,
De
pirotecnia y brillo.
Espectáculo
radiante,
En
los cielos de Burguillos.
Culebrillas
en Guruviejo,
Y
truenos en el Castillo.
Les
sacaron las entrañas,
Nos
quedaron sin ruido,
Todo
se quedó en silencio,
Un
pueblo desconocido.
Ya
no atemoriza a nadie,
Con
sus atroces rugidos,
¡Qué
furia en aquellos cielos!,
¡Qué
temido era Burguillos!
Copyright © 16/2012/1160
Soy muy aficionada a la poesía y esta me parece muy bella y escalofriante.
ResponderEliminarMe encantó
He leído tu poesía y me he metido sin darme cuenta en un panorama extraño y sugestivo. Majestuosa descripción poética de la tormenta, una belleza llena de misterios.
ResponderEliminarYa va siendo hora de que te hagan hijo predilecto, biógrafo literario o fotógrafo oficial Burguillos.
ResponderEliminarBendito pueblo cuantas perlas le dedicas, tu blog despide aroma de tu tierra, (localismos, fotos, poesías tan bellas como la encina, el castillo, el olivo, las tormentas..., etc). Aquí queda dicho.
Un abrazo
Algunas veces tus poesías son buenas, otras son muy buenas, pero esta es excelente.
ResponderEliminarTe expresa con una facilidad excepcional, que bonito y desgarrador poema a la tormenta y luego su quietud.
ResponderEliminarGracias
Me gusta mucho esta poesía (tormenta, rayos despavoridos sierras bramando y traca final después el sosiego y la paz) Me parece que sientes todo lo que escribes y te lo agradecemos.
ResponderEliminarLas tormentas tan llenas de recuerdos hay que disfrutarlas, ya no tienen muchos truenos para gastar.
ResponderEliminarSimplemente genial
Me gustan las tormentas con rayos y truenos, aunque a veces confieso me dan algo de miedo. Hay escrito por ahí:
ResponderEliminarAyer vino una tormenta que no puso el cielo gris,
lo llenó de mil colores,
imposible describir.
Me gusta tu tormenta burguillana.