Sin nada Nací
sin nada, nada
me pertenece, y
mientras tanto, no
paro de llorar.
Me
siento huérfano, llamo
a gritos, quiero
volver a ese lugar secreto, que
es tu vientre.
Sin
nada… siento
un gran vacío, y
hasta que encuentre el norte, no
hay nada que explorar.
Si
nací sin nada, nada
puede arrebatarme, el
espectáculo inmenso que
me ofrece tu mirada.
Hace
ya tiempo, que
mi deseo te cerca, mientras
la pálida noche, alimenta
el fuego de sentirnos vivos.
Un
roce, un eco que puebla el silencio, en
la soledad de mi fantasía, el amor… abre
las alas del corazón, todo
un prodigio contemplar tu astronomía. Copyright © RTPI 16/2020/1580
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Me gusta el poema, lleno de simbolismo y una gran dosis de fantasía.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo