Mar
tranquilo, mar furioso,
Que devoras
a la tierra,
Con tu brazo
luctuoso,
Avanzando en
son de guerra.
Pintas las
noches de fuego,
Que rompen
la oscuridad,
Iluminas los
caminos,
A marineros
errantes,
En
insondable orfandad.
Esa selva de
coral,
Que en tus
entrañas florece,
Pinta de
azul y se estremece,
Al ver las
olas pasar.
Con sus
canciones de espumas,
Y la sonrisa
en la boca,
Latidos
callados entre las dunas,
Que se
funden con las rocas.
Mal furioso,
mal calmado,
De bravura
despojado,
Silencio en
la marejada,
Cubriendo a
la tibia arena en la ensenada.
Copyright © 16/2013/4950
Tu poesía es como una brisa de agua fresca que nos trae nuestro lindo mar mediterráneo.
ResponderEliminarBonito de verdad
Me encanta la imagen que das de nuestro mar tranquilo, altivo y furioso en un trabajo muy de tallado y de mucha altura.
ResponderEliminarUn bonito regalo para final de año.
Feliz entrada y salida
Sabes reflejar muy bien las emociones, y combinas la inspiración con el pincel y al final fluyen los versos de un gran comunicador.
ResponderEliminarFelicidades
Muy fina y sutil, Nico, esta descripción de nuestro mar, combinando naturaleza y sentimientos.
ResponderEliminarAdelante con esa fresca inspiración.
Un abrazo.